Mi corazón rompió el ritmo
cuando te vi cruzar el parque, dispuesta a cambiar nuestros destinos.
Sonreías, lo recuerdo, entera, arrogante, seductora,
vestías de negro, y jadeabas,
marcando el paso, dejabas huellas, en el prado y en mi alma, lo que habíamos escrito se cumplía,nos fusionábamos, al fin, entre ardores que ya no eran platónicos.
... De las palabras pasamos a los hechos, de los versos a los besos...
de lo etereo a lo físico, a dejar marcas y rubricas,
alguna mía se te prendo en el pecho, otra tuya rasgo mi espalda.
Desafiamos, no huimos, encaramos sin abstinencias al deseo y al tiempo...
sabias Tú ,y leía yo
Juraba yo, y sentías tú
que después de la primera vez,nuestros sentidos no se conformarían
que solo la muerte nos separaría
entre porfía y porfía. Nunca el desamor.
Por todo esto querida entiendo tu ausencia, cercana a la mía,...Y aguardo en aquel parque a medio día.
Conozco tus rutas y tus horarios
tus ciclos y tus razones
tus apuros, y tus silencios y se de los mios…que te extrañan y no lo cuentan.
Vuelve.
OSWALDO PAZ Y MIÑO J
VOCEADOR DE LECTURAS
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